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Cremas y sopas

Crema bicolor de primavera

Esta crema es una celebración de frescura. En realidad son dos cremas diferentes, así que aquí sí se aplica lo de: “dos al precio de una”. Cada una es deliciosa por su cuenta pero sus sabores opuestos, asombrosamente, encajan de manera agradable en la boca. Además, su presentación conjunta es maravillosa, vistosa y alegre. El otro aspecto maravilloso de este plato es que se puede servir caliente o frío.

En Alimentación Konsciente somos adictos a las cremas de verduras. Son rápidas, nutritivas, saludables, fáciles de digerir y excelentes aliados a la hora de organizar el menú semanal y el batch cooking. Son una "win-win situation".


Crema de zanahoria, jengibre y miso

Ingredientes:

  • 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • 3 cebollas pequeñas, cortadas en cubitos
  • 1 trocito de jengibre fresco, picado
  • 4 tazas de zanahorias picadas y peladas (aproximadamente algo más de un kilo)
  • 4 tazas de agua
  • 1/2 taza de jugo de naranja recién exprimido
  • 1 cucharada de miso blanco
  • 1 pizca de sal del Himalaya, al gusto

 

Crema de guisantes

Ingredientes:

  • 3 cebollas pequeñas
  • 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
  • 6 tazas de guisantes frescos o congelados
  • 5 tazas de caldo de verduras
  • 3/4 taza de hojas de menta fresca (u otra hierba: albahaca, cilantro, perejil, etc.)
  • 1 cucharada de jarabe de arce
  • 1limón (zumo)
  • Sal del Himalaya, al gusto

Instrucciones:

  1. Corta la cebolla y reserva.
  2. Coloca dos ollas al fuego y agrega un poco de aceite de oliva. Cuando se caliente, agrega las cebollas a las dos ollas y el jengibre picado a una, añade un poco de sal. Cocina hasta que las cebollas estén transparentes. Aparta la olla que contiene la “solo cebolla”. A mí me gusta utilizar aceite de coco si pocho la cebolla y si no, ponerlo todo en crudo y añadir el aceite de oliva al final, cuando ya esté lista la crema; como siempre os digo cada cuál lo hace como crea mejor.
  3. En la olla de la cebolla y el jengibre, agrega las zanahorias picadas y revuelve. Añade el agua, tapa y cocina a fuego lento durante 35-40 minutos, hasta que las zanahorias estén tiernas.
  4. Cuando las zanahorias estén casi tiernas, pon la otra olla de nuevo al fuego, añade los guisantes y el caldo. Cocina a fuego lento, sin tapar durante 5-7 minutos, justo hasta que los guisantes estén cocidos. ¡No los conviertas en papilla!
  5. Ahora tienes la base para ambas cremas. Sólo hace falta batir bien. Mientras bates la crema de zanahoria, añade el jugo de naranja, el miso y sal al gusto. Mientras bates la crema de guisantes, agrega la menta, el sirope de arce, el jugo de limón y sal al gusto.
  6. Para servir, vierte la crema en una mitad del cuenco, y la otra crema en el otro lado. Serán densidades similares, por lo que no se deberán mezclar al servirlos. Si se desea, decorar con menta fresca u otra hierba verde, unos pistachos ligeramente tostados y un chorrito de aceite de oliva de calidad.


Con Amor,
Natalia



Publicado por Natalia Croissier el 08/05/2012