Queridos, hoy les traigo una receta maravillosa, y tan fácil, tan fácil, tan fácil, que casi vas a tardar lo mismo en prepararlas que en comértelas. Y no, no es que yo quiera que te comas las 10-12 galletas que te saldrán con esta receta de una sentada. ¡Válgame el cielo! como diría D. Pedro Calderón de la Barca. Pero de lo que estoy segura es que al probarlas sí que te va a parecer que “La vida es sueño”, pero de los buenos, de los que uno no querría despertarse nunca por más que ames la vida, de los que te abrazan bonito y te velan el alma. Es lo que tienen las galletas, máxime sin no llevan harinas ni gluten.

Ingredientes:

• 1 huevo ecológico
• 1/2 taza de calabacín rallado
• 1/2 taza de mantequilla de almendras
• 1/4 taza de semillas de cáñamo
• 2 cucharadas de jarabe de arce o azúcar de coco
• 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
• 1/2 cucharadita de canela
• 1/4 cucharadita de vainilla
• 1/4 cucharadita de nuez moscada
• 1/4 cucharadita de jengibre

Instrucciones:

1. Pon todos los ingredientes en un bol y mezcla hasta que obtengas una masa homogénea bien ligada.
2. Con la ayuda de una cuchara, dispón la masa de cada galleta sobre una bandeja de horno forrada con papel pergamino.
3. Hornea entre 170º-180º C durante 10-12 minutos y deja enfriar durante unos minutos antes de retirar las galletas de la bandeja. Recuerda que debes precalentar el horno previamente.

 

Una cosita chicos, es muy importante que no se les vaya a ocurrir hacer un sandwich de helado con estas deliciosas galletas, porque entonces no van a poder evitar enamorarse, ???? . Les adelanto que para evitar la tentación van a tener que trabajar duro la contención. Todo un reto de superación personal. Casi casi tan duro como subir a la cima del K2. ????

Foto de Alison